EFFG: guerreros.

El conjunto a bastones finalizó su campaña en el torneo Clausura 2010 sin obtener el tan preciado campeonato. Celtic FC ganó su partido, y EFFG® empato 4-4 frente a los pecho helado de Sin Casa.
Un partido que fue muy raro, ya que a los 3 minutos del primer tiempo los bastones estaban 0-2, y toda ilusión se estaba acabando. En un intento de reacción, Fran descontaría para un 1-2, pero duró poco, ya que tras quedar muy mal parado en una contra, y luego perder las marcas en una pelota parada, el 1-4 en 25 minutos del primer tiempo parecía sentenciar la victoria para los frescos.
Ahi mismo se produjo el cambio de actitud, cuando EFFG se dió cuenta que tenía que salir a llevar por delante a su rival. Tras un rebote en el area Ape puso el 2-4 antes de finalizar la primera etapa, lo que llevó a un respiro clave para el entretiempo, que alentaba a los bastoneros a buscar más. Claro que esto se sumaba a la cara de susto de los rivales.
El segundo período fue todo del albiazúl. Plantado ya con decisión para empatar, sufrió EFFG una baja importante tras la salida de Marrita con el ojo en compota luego de un pelotazo. Pero seguía remando contra la adversidad este equipo de guerreros. Una pelota parada fue la clave, que tras un cabezazo de Ape, un defensor rival atajó la pelota, consecuencia de expulsión y penal. Augol cambió por gol, y el 3-4 motivaba aún más a los bastoneros. 4 minutos de adición marcó el arbitro del partido, y faltando un minuto Jero pateó al arco de zurda, Fran desvió la trayectoria con un cabezazo y la pelota fue a la red. Este 4-4 no sólo asustó a los de Sin Casa, sino que encendió aún más a los effgianos que tras salir como leones a robar la pelota faltando un minuto, tendrían la última jugada. Augol metió una bocha espectacular para Fran que apareció de puntero derecho, encaró al arquero, engancho para el medio y cayendose definió mordido de zurda al palo mas lejano. El arquero no llegaba pero apareció un defensor para rechazar la pelota en la linea y salvar del papelón a Sin Casa. La hazaña pudo ser mayor con el 5-4, pero la remontada fue igualmente espectacular, y los guerreros effgianos dejaron demostrado que la pasión que sienten por la camiseta, y la solidaridad entre sus miembros, es un sentimiento compartido en esta familia.

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Palabras aparte para el Dr. Carracedo que sufrió un pelotazo que, según me dijeron, lo dejó medio ciego. Le mandamos un abrazo enorme, y ojalá que su travesía por el norte sea más que satisfactoria. La 18... La 18 no se mancha.